Este martes, el Fondo Monetario internacional (FMI), dio a conocer el último informe de Perspectivas Económicas Mundiales, en el que proyecta que el 2024 será un año recesivo para la economía argentina, pero que habría una recuperación para el 2025 con una desaceleración de precios.
De esta manera, el FMI ratificó la previsión anticipada a comienzos de año, en la que señaló que el Producto Bruto Interno (PBI) caerá un 2,8% en 2024, aunque se trata de una cifra más chica que el 3,5% proyectado por el Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) del Banco Central de la República Argentina.
Asimismo, el organismo multilateral difundió, entre sus datos, que la inflación del 2024 llegaría al 149,4%, a diferencia del índice del 189,4% que proyecta el REM del Banco Central, mientras que, gracias a la desaceleración de la subida de precios, para 2025 marcaría un 45% junto a una expansión del PBI del 5%.
En el informe, el FMI registró que, luego del déficit de cuenta corriente del 3,5% del PBI del año pasado, tras los recortes de subsidios y la eliminación de una serie de fondos, podría haber un superávit del 0,9%, al tiempo que la tasa de desocupación alcanzaría al 8% de la población activa del 2024 pero que se reduciría al 7,5% en 2025.
Por su parte, en el informe internacional, el consejero económico del ente financiero, destacó que, tras el “accidentado camino” que comenzó con la pandemia de coronavirus, la economía mundial mostró tener “resiliencia notable” y destacó que el “crecimiento se mantiene firme ante el retorno de la inflación”.
De esta manera, el FMI consideró que, a pesar de que el crecimiento mundial interanual tocó fondo a finales de 2022 con un -2.3%, para los años 2024 y 2025, el crecimiento la inflación se mantendrá estable en torno al 3,2%, mientras que la mediana de la general bajará en un “aterrizaje suave” hasta 2,4% a finales de 2025.
“Pese a esta evolución favorable, siguen existiendo numerosos retos que hacen necesario adoptar medidas decisivas”, sostuvo el funcionario del FMI, que luego destacó que “si bien las tendencias de la inflación son alentadoras, todavía no se llegó al final”.
Respecto a la inflación mundial, el FMI destacó que prevé que el aumento de precios descienda del 6,8% de 2023 a un 5,9% en 2024 y al 4,5% en 2024, a la vez que esperan que las economías principales alcancen sus metas financieras mucho antes que las emergentes y en desarrollo.
