Si analizamos la parte política podremos visualizar la disconformidad de algunos dirigentes por la falta de gestión y diálogo con las fuerzas que acompañaron al triunfo al massista Ricardo Marino, y hablamos solo de algunos, ya que hay parte del conglomerado del partido Justicialista que por conveniencia no sacaría los pies del plato, ya que de ser críticos podrían perder pequeños espacios de poder, vale aclarar que en off son más críticos que la lista oposición, lo que también demuestra solo permanecer mientras se pueda.
En referencia a la gestión, en un raid de consultas a lo largo y a lo ancho del partido de Patagones el pulgar apunta hacia abajo en la totalidad de los consultados, la voces críticas se pueden escuchar no sólo en los diversos espacios oficialistas y opositores, también desaprueban el rumbo de la gestión ciudadanos comunes y aunque parezca mentira militantes del Frente Renovador, quienes manifiestan sentirse defraudados.
La soberbia es la primer palabra que se escucha, lamentablemente hay muchos funcionarios que no aceptan recomendaciones y menos aún alguna crítica. Y vale citar una frase que dice, “La soberbia es el camino más corto a la soledad”
La misión de los funcionarios que no funcionan, es solo esperar que llegue fin de mes, hacen tiempo como en un partido de fútbol en el que se va ganando, ósea si hacemos tiempo todos triunfamos sin esfuerzos.
La ciudadanía comienza a ofuscarse, los tiempos de luna de miel ya se terminaron, ya no vale “a pero Zara...“ hoy la responsabilidad es absoluta de quien se presentó en una contienda electoral y le dieron el voto de confianza, lamentablemente no aprenden de los errores de los antecesores y van con más velocidad para cometer los mismos o peores.
No sirve permanecer, no sirve transcurrir, no sirve el diario de Yrigoyen. O toman el toro por las astas y dan un golpe de timón por el bienestar de la sociedad en su conjunto, o Dios, la Patria y la ciudadanía se los demandará.
